Solidaridad ed ecologie 4º ESO

Excitados por el comienzo de esta nueva experiencia fuera del país, en 2º-ESO muchos de nosotros ya habíamos participado en otro intercambio con un colegio de París, 38 alumnos de Jesús y María y de La Inmaculada MSJO, cogimos el bus a las cinco y media de la mañana del lunes, día 1 de octubre de 2018.  

El viaje fue muy largo, unas 14 horas de bus, pero las ganas y la emoción que sentíamos por conocer a nuestros futuros correspondientes y nuestro futuro hogar, en los siguientes siete días, nos hizo el viaje mucho más llevadero y ameno.

 

El primer día, martes 2, el collège Marguerite Duras, de Montélimar, nos acogió con un desayuno, y con las palabras de bienvenida del director del centro y del concejal de cultura del ayuntamiento de la ciudad; el director se alegró y nos felicitó porque esta experiencia llega en este curso a su décima edición.  Una foto dió por concluido el momento. Después nos dividieron en dos grupos, uno de ellos fue a hacer actividades con los correspondientes en la plataforma eTwinning, y el otro visitó una fábrica de elaboración artesanal y ecológica de turrón, para descubrir cómo se hace este producto, el mazapán, los frutos secos bañados en chocolate o “las nubes”. Una semana después se repitió la actividad cambiando los grupos, de manera que todos hiciésemos lo mismo.

Durante nuestra estancia hemos desarrollado actividades ligadas al proyecto eTwinning del año: “Solidaridad ed ecologie” (el título recoge los tres idiomas de los países participantes), tarea en la que colaboramos con otro centro italiano de Bolonia. Así, hemos tenido la presencia de unas señoras voluntarias de un pequeño pueblo, Saint Montan, que nos han hablado de la escuela de Pullalé (Burkina Faso) donde se ayuda a los niños gracias al reciclado del material escolar que recogemos entre todos los colegios; una compañera de la Inmaculada nos ha referido cómo con los tapones colaboran con una asociación de parados del barrio; otra profesora nos ha contado que el colegio italiano colabora con otra asociación de parados ofreciendo bisutería para el reciclado; finalmente, nuestro colegio ha expuesto la idea de la limpieza de una zona pública, acción que se llevará a cabo durante la segunda parte del intercambio, teniendo muy en cuenta el grave problema mundial de los plásticos.

La mañana del miércoles, día 3, la pasamos en el mercado local, anduvimos trabajando el vocabulario ligado a las frutas y verduras, fue una experiencia muy simpática y divertida, aunque el aire “mistral” fue muy molesto.

Hemos hecho varios viajes a ciudades grandes. Los viajes nos han ayudado  a nutrirnos de cultura y aprender un poco más sobre la vida de sus habitantes.

Nos gustaría hacer un comentario sobre Lyon, una ciudad majestuosamente grande y perfectamente organizada en el casco antiguo con sus reputadas “traboules!”; unas guías nos explicaron las principales caracteŕisticas del  origen de la ciudad y su evolución a lo largo de la historia. En nuestro tiempo libre paseamos por la “Presqu’île”, barrio clásico encerrado entre los ríos Ródano y Saône, lleno de tiendas de todo tipo y espectaculares edificios, como el Ayuntamiento o el Palacio de la Ópera, muchos nos acordamos de calles de París. Este regalo lo disfrutamos el jueves, día 4.

El viernes 5 nos desplazamos hasta Nîmes. Primero visitamos la planta de reciclaje de basura no orgánica de Valréna, competimos entre grupos, vimos el proceso de separación de basura, y nos mostraron las múltiples ventajas del reciclaje. A continuación nos desplazamos al centro de la ciudad para pasear por su fabuloso centro histórico, con la “maison carrée” y el anfiteatro romano como protagonistas absolutos de un pasado brillante de esta urbe.

Los días han pasado rápidamente, pero nos quedamos con buenos recuerdos que permanecerán en nosotros para siempre, con una segunda familia en Montélimar, nuevos amigos y mucha conciencia de todas las puertas que nos abre el aprendizaje de otros idiomas. Qué suerte que nuestro colegio nos ofrezca  esta actividad.

Y finalmente con los ojos llenos de lágrimas, también en algunas mamás francesas,  emprendimos nuestro poco deseado viaje de vuelta a casa. A las 7 de la mañana del día 9 de octubre.

Todos nosotros lo volveríamos a repetir sin dudar.

Mencía Belloso y Pablo Ferreras

 

Dejamos unas fotos con diversos momentos vividos en estos días.