Dicen que las segundas partes nunca son buenas pero no es verdad y os lo vamos a demostrar. Durante el mes de marzo hemos dado continuidad al intercambio con el colegio Centennial que iniciamos en octubre. En esta ocasión han sido los alumnos americanos quienes se han dado cita en nuestro cole y si la experiencia que vivimos cuando visitamos su centro fue inolvidable , los momentos que hemos podido compartir con ellos en nuestra ciudad han sido igual de estupendos.

Durante su estancia aquí hemos podido consolidar esas amistades algo tímidas que nacieron en octubre y hemos podido comprender su cultura aún más gracias a las presentaciones que nos han hecho en clase. Hemos reído, jugado, hablado y aprendido con ellos y, por supuesto, ellos con nosotros: nuestro flamenquito, nuestra rica paella y lechazo, el cocido en los pueblos de nuestras abuelas … en fin nuestros amigos han podido comprobar in situ lo fantástica que es la gente de nuestra ciudad y cómo nos volcamos para hacer que todos se sientan acogidos.

Nosotras, las profesoras, nos sentimos orgullosas de haber contribuido a hacer que esto sea posible.Siempre sabemos antes de comenzar la aventura que el poder contar con familias y alumnos tan comprometidos garantiza el éxito.

“Queremos que se lo pasen igual de bien que nos lo hemos pasado nosotros”, este era uno de los deseos de una de nuestras alumnas antes de recibir a los estudiantes americanos y lo hemos cumplido con creces. ¡Gracias a todos por hacer que esto sea posible!